miércoles, 2 de abril de 2008

Ciclos

Algo les pasa a mis chicos porque están demasiado tranquilos. En el 4º de ESO faltan dos alumnos que hicieron amagos de irse a estudiar ciclos.

Uno de ellos quería entrar en 4º de diversificación curricular (conocido popularmente como díver); un curso modificado, con exigencias conceptuales inferiores a un curso normal pero en el que se exige trabajo. Entrar en un programa así exige cumplir un perfil de alumno trabajador pero que no consigue dominar la asignatura. Bien, pues el alumno este es un vago absoluto. En ocasiones ni me traía el material. Y un día vino con su madre para lanzarnos un ultimátum: o entraba en díver o se iba. «Pues ya sabes dónde está la puerta» contésto la jefa de estudios, y se calmó pero igual se larga de verdad.

El otro es más inteligente que la mayoría de los que tengo en esa clase pero no le gusta estudiar. De repente le dio por un ciclo de no me acuerdo qué y dejó de traer el material a clase y de copiar y de atender y no hacía nada más que molestar (más o menos como el de arriba). Tenía un expediente pendiente que se paralizó porque se suponía que se iba a ir pero sin embargo no acababa de darse de baja. Se acordó que si volvía después de las vacaciones, se le abriría el expediente. Yo creo que se ha ido.

Y por eso, el 4º ahora da gusto.

En 2º incluso la maquilladora me atiende... ¿Qué está pasando aquí?

También un profe que es PT (psicopedagogo terapeuta) se va por un tiempo: 2 meses de excedencia (sin sueldo, por supuesto). Vino a decirlo ayer y se supone que mandarán a alguien, pero mientras tanto, pobres los de guardia porque tendrán que ir con los de compensatoria, que son de lo peor.

Y hablando de ciclos, hoy me ha dicho el alumno «lisensiado» cómo me llaman algunos alumnos, o sea, que ya tengo mote. Me dijo que era Batista. Batista es un tío de pressing catch del que no paran de hablar los de 2º; dicen que me parezco en la cara porque llevaba también la perilla como él: de frenazo de bici. Ahora la llevo de mosca. Yo creo que quepo dentro de uno de sus brazos, ja, ja, ja, ja. Bueno, aquí va una foto del pollo:

1 comentario:

amelche dijo...

¿Te pareces a ese? Espero que no sea en los músculos, ni en la camiseta negra. Espero que sólo sea en la perilla. :-)