lunes, 1 de junio de 2009

El vigilante

Durante el recreo subo al departamento de Mates, que está en la segunda planta, y al ir a abrir con llave la puerta noto que ya está abierta. Entro y hay un señor de negro sentado en una silla mirando por la ventana (que da al patio) con unos prismáticos.

—Hola.
—Hola.

Le miro y él hace como si nada y sigue mirando hacia el patio. Yo busco unos libros. Pasan los minutos y cada vez me siento más ridículo. ¿Por qué, sencillamente, no le pregunto quien es y salgo de dudas? Más silencio. Advierto que lleva un walki talkie. Suena de manera característica y un fulano, al otro lado, dice:
—¿Puedes hablar?
—En parte.
Silencio.
—¿Tienes llave del departamento? —es lo que acierto a preguntar para romper el hielo.
—Me ha abierto la directora.
...
—Y, ¿qué haces?, si se puede saber...
—Vigilancia de tráfico de drogas. Sospechamos de algunos alumnos —vuelve a enfocar con los prismáticos.
—Creo que el chaval ese...
Y describe con pelos y señales al Gemelo Malo, que ya ha vuelto de su expulsión. Por qué no me extraña que sea un camello en potencia.
—Pues ése es Gemelo Malo.
—Tomo nota.
—En fin, buena cacería. Me bajo.

4 comentarios:

amelche dijo...

Madre mía, ¡cómo sube el nivel de espionaje en el IES!

amelche dijo...

Oye, dile que, si se aburre, se venga al mío, que hay mucho sospechoso que cazar. :-) Aunque sería más fácil pillarlos en el parque de en frente.

Garin P. dijo...

Pregunté un poco y resulta que son de la Guardia Civil y cuando tienen un soplo vienen. O sea, no es la primera vez que pasa. Principalmente se fijan en los personajes que están fuera, junto a la valla.

amelche dijo...

¡Qué nivel! A nosotros, como mucho, viene la poli local. Y eso, si se han fugado (como siempre) los alumnos más golfos y están tirando piedras en el parque de al lado.